Organización de las acciones de promoción de salud y prevención de enfermedades y otros daños enfocadas a modificar estilos de vida y evitar los factores de riesgo.
Acercamiento de los servicios de la salud a la comunidad.
La cobertura vacunal superior a 98,7% en menores de un año para nueve enfermedades. Desde el año 2016, la población infantil cubana está protegida de 13 afecciones prevenibles con vacunas.
La captación temprana de más de 95% de las mujeres embarazadas antes de las 12 semanas de gestación, lo que ha permitido elevar la calidad de la atención prenatal.
En 2016, las consultas externas en el primer nivel de atención representaron 92,8% del total, y las consultas de cuerpo de guardia el 61,4%.
Incremento de la lactancia materna exclusiva hasta el sexto mes de vida.
Mayor acceso a la fisioterapia y rehabilitación, gracias a la extensión de los servicios y por prescripción de este tratamiento en mayor número de afecciones.
Consolidación de las prácticas de medicina natural y tradicional.
Descenso de la estadía hospitalaria de 6,4 días en 1990 a 4,7 en 2016, entre otros elementos gracias a la capacidad resolutiva y el seguimiento de pacientes con alta temprana en el primer nivel de atención.
Aumento de las acciones de planificación familiar y de educación sexual con resultados positivos, el porcentaje de cobertura anticoncepcional total es superior a 77% desde hace más de una década. Se destaca que el uso del condón se ha incrementado en 2,4 veces durante las dos últimas décadas.
Elevación de la esperanza de vida al nacer a 77 años en los hombres y 81 años en las mujeres.