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. 2018 Sep 24;42:e133. [Article in Spanish] doi: 10.26633/RPSP.2018.133

Participación de los usuarios en las decisiones clínicas en la atención primaria de salud en Chile

User Participation in Clinical Decision-making in Primary Health Care in Chile

Participação dos usuários nas decisões clínicas na atenção primária à saúde no Chile

Paulina Bravo 1,, Angelina Dois 2, Aixa Contreras 3, Gabriela Soto 4, Isabel Mora 4
PMCID: PMC6385627  PMID: 31093161

RESUMEN

Objetivo

Describir la experiencia de participación en las decisiones clínicas desde la perspectiva de usuarios de Centros de Salud Familiar (CESFAM) de la Atención Primaria de Salud (APS).

Métodos

Estudio de diseño cualitativo descriptivo; se realizaron grupos focales con usuarios de CESFAM del área sudeste de Santiago, Chile, y análisis temático de la información utilizando el programa Atlas.ti versión 6®.

Resultados

Se realizaron cinco grupos focales (n = 41). Los principales temas emergentes fueron el rol pasivo de los usuarios en las decisiones y la toma de decisión delegada, basada en la confianza en el profesional. El rol pasivo de los usuarios limita las oportunidades de participación en las decisiones clínicas y mantiene el poder en los profesionales de la salud. A pesar de ello, el establecimiento de una alianza terapéutica les permita sentirse tratados como personas únicas, escuchados y respetados por los profesionales, lo que asegura que las decisiones tomadas por el equipo de salud son confiables, pues velan por sus reales intereses.

Conclusión

La participación de los usuarios en los encuentros clínicos es aún escasa en el país. Sin embargo, potenciar esta participación es esencial para aumentar la satisfacción usuaria y promover un cuidado centrado en la persona.

Palabras clave: Atención primaria de salud, participación de la comunidad, toma de decisiones, Chile


A nivel mundial, existe un interés por involucrar de manera activa a las personas en salud, respetando el derecho a que se consideren las preferencias de los usuarios (1) e involucrándolos en la búsqueda de alternativas terapéuticas que les permitan mantener una mejor calidad de vida y bienestar (25).

Ya desde la declaración de Alma-Ata se subraya la importancia de la participación de las personas y de la comunidad cuando se afirma que “las personas tienen el derecho y el deber de participar individual y colectivamente en la planificación e implementación de su atención sanitaria” (6) y se vincula el derecho de las personas a la salud con su derecho a participar en las decisiones que afectan su vida (7). Así, promover la salud de las personas implica proveerlos de los recursos necesarios para ejercer un mayor control sobre esta (8).

El gobierno chileno ha mostrado un avance progresivo en esta temática. El fortalecimiento de la atención primaria de salud (APS) en Chile hace eco del llamado a renovar la estrategia de APS en el mundo de manera de mejorar las condiciones y calidad de vida de la población (9). El Modelo Integral de Salud Familiar y Comunitario (MAIS) vigente en el país se alinea con esfuerzos internacionales por involucrar a las personas en sus cuidados de salud, para avanzar desde un modelo paternalista donde el usuario se emplaza en un lugar de pasividad, hacia un enfoque participativo (1). En la última década, Chile se ha centrado en potenciar el rol activo de los usuarios en procesos de gestión de salud, involucrándolos de manera comunitaria en procesos consultivos (como por ejemplo en el desarrollo de los Objetivos Sanitarios para la década) hasta instancias de planificación y evaluación (por ejemplo, presupuestos participativos de los servicios de salud) (10, 11).

El MAIS establece tres principios irrenunciables que orientan el quehacer de los equipos de salud: el cuidado centrado en la persona (centralidad), la continuidad y la integralidad de la atención (12). El cuidado centrado en la persona (CCP) considera que el usuario es corresponsable de su cuidado, en colaboración con el equipo de salud. Por ello, los usuarios necesitan recibir la información adecuada que les permita participar de manera activa e informada en la toma de decisiones relacionadas a su cuidado y sentirse tratados de manera digna (13). A esto se suma el llamado del Ministerio de Salud de Chile para promover la participación de las personas como elemento fundamental para la satisfacción usuaria, la calidad de la atención y una práctica profesional ética (2, 3). Esto está respaldado por la legislación sobre los deberes y derechos de las personas en salud, que reconoce la dignidad y autonomía de los usuarios en las decisiones relacionadas a su cuidado (2) y el Plan Estratégico de salud para la década que señala que “no hay mejor médico que uno mismo” (3).

Todos estos antecedentes permiten vislumbrar un panorama esperanzador para la promoción de la participación de los usuarios en los encuentros de salud. Sin embargo, a pesar de este compromiso, Chile aún carece de estrategias específicas que permitan operacionalizar la participación de los usuarios en las decisiones clínicas (14) y tampoco se tiene un diagnóstico sobre el nivel de participación de los usuarios en las decisiones de salud. El objetivo de este artículo es describir la experiencia de participación en las decisiones clínicas en APS desde la perspectiva de usuarios de Centros de Salud Familiar (CESFAM).

MATERIALES Y MÉTODOS

Se realizó un estudio cualitativo, en el que se condujeron grupos focales con usuarios de CESFAM de Santiago, Chile. Los grupos focales son identificados como una herramienta de investigación que, a través de la entrevista grupal, permite la interacción del grupo, recogiendo diversas experiencias en el relato de los participantes. El investigador actúa como moderador mediante el planteo de preguntas, mantiene el ritmo de la conversación y promueve la participación de los miembros (15). En la riqueza de esta interacción, el investigador puede recoger información valiosa, como anécdotas, comentarios y experiencias de sus participantes que permiten entender el fenómeno en estudio (15, 16).

Participantes

Los participantes fueron usuarios de CESFAM de dos comunas del área sudes te de Santiago. La información se recogió entre enero y mayo de 2015, se utilizó muestreo por conveniencia, y se invitó a participar a usuarios que hubieran asistido al CESFAM durante la fase del reclutamiento y bola de nieve, en cuanto se solicitó a los participantes que extendieran la invitación a otros usuarios de su red de contactos potencialmente interesados en participar del estudio. Los criterios de inclusión fueron personas mayores de 18 años, usuarias del mismo CESFAM durante al menos dos años y sin discapacidad o enfermedad grave que impidiera la adecuada comprensión de las preguntas y la manifestación de su opinión o voluntad.

Análisis de la información

Los grupos focales fueron audiograbados y transcritos verbatim, para facilitar la inmersión de los investigadores con la información y el análisis. Se usó un guion de entrevista elaborado con base en la evidencia disponible y sometido a validación de contenido por expertos (disponible previa solicitud a los autores). El criterio de finalización fue la saturación teórica. Se condujo un análisis temático, asistido por el software computacional ATLAS.ti versión 6®. El proceso de análisis incluyó los siguientes pasos (17):

  • 1) Familiarización de la información: tres investigadores recogieron información; las transcripciones fueron realizadas por un ayudante de investigación supervisado por los investigadores;

  • 2) Los investigadores realizaron una selección de datos relevantes (extractos de la información), que ayudaron a entender el fenómeno de la participación en las decisiones de salud;

  • 3) Los investigadores asignaron códigos a los extractos de información que ayudaran a entender el fenómeno;

  • 4) Los códigos se agruparon en patrones o temas que integran el significado del fenómeno y que ayudan a describirlo;

  • 5) Se realizó una descripción exhaustiva de la naturaleza de la participación de los usuarios en las decisiones de salud.

El estudio contó con la aprobación del Comité Ético Científico de la Facultad de Medicina de la Pontificia Universidad Católica de Chile y del Comité de Ética del Servicio Metropolitano Sur-Oriente. El proceso de consentimiento informado fue realizado por las investigadoras, procurando promover en los usuarios la voluntariedad de la participación y la comprensión de los riesgos y beneficios asociados a este proyecto. Todos los participantes firmaron el documento de consentimiento informado. La información fue tratada de manera anónima, los datos sensibles de los participantes fueron almacenados separados de los archivos de audio, consentimientos y transcripciones.

RESULTADOS

Se realizaron cinco grupos focales, con 10 hombres y 31 mujeres, de 43,8 años de edad promedio, en un rango de 18 a 78 años, todos usuarios del mismo CESFAM por 10,8 años en promedio.

Del total, 92,7% asistía de forma regular a sus controles de salud y 29,2% asistía en forma regular, además, a otras actividades desarrolladas por el Centro.

Principales temas emergentes

Después de un riguroso proceso de análisis, se identificaron patrones en la información, de la cual emergieron dos temas que caracterizan la participación de los usuarios en las decisiones en salud (cuadro 1).

CUADRO 1. Temas y subtemas emergentes que caracterizan la participación de los usuarios chilenos en la toma de decisiones en salud.

Tema Subtema
Rol pasivo de los usuarios en la toma de decisiones Falta de participación de los usuarios: sin oportunidades y centrados en solo un problema de salud
El profesional toma las decisiones: sin participación del usuario y, a veces, poco efectivas
Decisiones clínicas delegadas y basadas en la confianza Comunicación efectiva: con lenguaje que permita a los usuarios comprender y que demuestre interés del profesional
Relación empática: que permita a los usuarios sentirse únicos y bien cuidados por los profesionales

Cuadro de elaboración propia con base en los resultados del estudio.

Rol pasivo de los usuarios en la toma de decisiones

Los participantes identifican nulas oportunidades de participación en las decisiones relacionadas con su salud como, por ejemplo, en la elección del profesional que lo atiende y en las acciones de tratamiento para su problema de salud.

Desde la perspectiva de los usuarios, la atención de salud es vista como un espacio en que existen escasas posibilidades de involucramiento y participación. Así, en los encuentros terapéuticos perciben que deben restringirse a resolver solo un problema de salud (que muchas veces no es el más importante) y evitar referirse a otras situaciones que pudiesen estar aquejándolos. Por tanto, en ese escenario de pasividad, los usuarios no identifican oportunidades de participación en las decisiones clínicas.

Me dice [el médico] “yo aquí, aquí es el médico el que manda”. (Hombre 1)

Los médicos no le conversan mucho a uno y uno quiere conversar, quiere meter más cosas y él se remite a eso, no más. (Mujer 1)

Yo [le digo al médico] “me duele la cabeza” …? [y él me dice] “¿Le duele la cabeza?, una aspirina poh amigo”, [le digo al médico] “doctor pero resulta que me duele la uña”, [y él me dice] “andá afuera a pedir una hora para la otra semana para que te vea la uña”. (Hombre 2)

Los usuarios también identifican que en la atención de salud es el profesional quien toma las decisiones clínicas, lo que incluye desde el problema de salud que se tratará durante la consulta hasta el tratamiento que debe realizar el usuario. Para los participantes, muchas veces esas decisiones no son las correctas, pues no resuelven sus problemas.

Los doctores [médico], tal cual como dice ella, no te miran, llegan y anotan. Se demoran con suerte tres minutos en atenderte y estás fuera. Pero las soluciones nunca es lo que uno necesita. (Mujer 3)

Me vio otro médico y [me dijo] “no si es normal, es normal, tómate paracetamol y hazte esto y esto otro. Entonces, uno no halla qué hacer, porque el dolor de rodillas cada vez es más intenso. (Mujer 4)

Decisiones clínicas delegadas y basadas en la confianza

Los usuarios reconocen que las decisiones son tomadas, en su mayoría, por los profesionales de la salud. Valoran de manera positiva cuando las decisiones han sido tomadas luego de haber establecido con los profesionales una alianza terapéutica, que se evidencia por una comunicación clara y efectiva y demostración de interés por sus problemas, lo que les permite confiar en el criterio del profesional.

Para comprender la decisión tomada por el profesional, los participantes necesitan que se haya utilizado un lenguaje comprensible para explicarles su problema de salud y las alternativas de tratamiento. Además, destacan como fundamental que exista una comunicación permanente con los profesionales de la salud y que puedan sentirse escuchados y respetados por ellos.

Porque yo quiero que me hablen en español no como “cha cha cha… pum, pum”. (Mujer 5)

Ojalá el médico nos escuchara, que nosotros pudiéramos decirle todo lo que nos está pasando porque a veces uno queda con tantas cosas de preguntar y llegamos a la casa con lo mismo y no sabemos. (Mujer 6)

Para los participantes, es fundamental que los profesionales los hagan sentir únicos y que demuestren genuina preocupación por lo que les acongoja. Esto les permite valorar que las decisiones tomadas por los profesionales se basan en el mejor interés de los usuarios.

Porque si un médico le pregunta …“¿tiene alguna duda??… -No. -?… ¿Y tiene alguna molestia? -No. -¿Y ha sentido algo como como esto?”. O sea él [médico] me preguntaba a mí, no era yo el que le decía, tengo esto, el me preguntaba… eso es algo personalizado, que a uno lo atiendan, que lo miren a los ojos. (Hombre 3)

El hecho que lo escuchen, que le den un consejo, que se fijen más, que no sea solamente un paciente o un número. (Mujer 7)

DISCUSIÓN

Este artículo presenta la experiencia de participación en la toma de decisiones clínicas desde la perspectiva de usuarios de CESFAM del área sudeste de Santiago. El rol pasivo de los usuarios en las consultas clínicas limita sus oportunidades de participación en las decisiones sanitarias, con el poder en manos de los profesionales de la salud. A pesar de ello, una relación terapéutica efectiva que les permita sentirse tratados como personas únicas, escuchados y respetados por los profesionales, les asegura que las decisiones tomadas por el equipo de salud velan por sus reales intereses.

El CCP, entendido como aquel que potencia la corresponsabilidad del cuidado, tiene efectos significativos en las mediciones de satisfacción usuaria, en resultados de salud en el mediano y largo plazos, y en la organización y coordinación de los servicios que proveen los prestadores de salud, lo que se traduce en una mejor calidad de atención y en una disminución de los costos globales de atención al evitar el uso excesivo de los servicios de salud con el consecuente consumo de horas profesionales (1821). A su vez, tiene el potencial de organizar la atención en salud y le permite al usuario experimentar una atención transparente, individualizada, respetuosa, digna, y con posibilidad de tomar decisiones en todos los asuntos referentes a su salud. Esto mejora la adherencia y fomenta la responsabilidad con su estado de salud (21, 22) e impacta de manera directa en la percepción de los usuarios respecto de la atención que reciben.

La experiencia de los participantes en términos de la decisión basada en la confianza coincide lo que en otros países se ha conceptualizado como una “atención exitosa”, en donde la comunicación, la atención personal y la empatía destacan como las principales características de una buena atención de salud (23). Los resultados presentados en este artículo son coherentes con los obtenidos por un grupo de investigadores chilenos que mostró que solo 56,1% de los usuarios percibe que el médico se preocupa siempre o casi siempre de él o ella como persona, porcentaje que disminuye a 46,3% en el caso de las enfermeras. El mismo estudio recogió la percepción de los usuarios sobre la posibilidad que tenían de dar su opinión y sostener un diálogo referente a su salud con los funcionarios de los centros de salud. Solo 52% de los usuarios dice que siempre o casi siempre puede dar su opinión respecto al tratamiento que se le indica y 26,5% de ellos manifiesta no poder dar su opinión nunca o casi nunca (24). Estos resultados evidencian que existe incumplimiento de la legislación vigente, en cuanto la Ley de Derechos y Deberes de los usuarios (Ley N° 20.584) garantiza un trato digno para las personas y la información oportuna, lo que debiera traducirse en un proceso de comunicación efectivo entre profesionales y usuarios. La falta de oportunidades de participación reportada por los usuarios indica que si bien Chile ha avanzado en temas de participación comunitaria en salud, la promoción del rol activo de los usuarios en el encuentro clínico es aún escasa (14). Investigadores han reportado que incluso la entrega de información no permite un rol más activo de los usuarios en salud, puesto que el desbalance de poder solo podrá corregirse cuando el sistema sanitario permita que tanto profesionales como usuarios estén preparados para asumir un rol colaborativo y horizontal (25, 26).

La fortaleza de este estudio se basa en que contribuye a la escasa literatura local que examina el rol de los usuarios en la toma de decisiones clínicas. Sin embargo, los resultados deben utilizarse con precaución, ya que se debe considerar la dificultad que ha tenido la instalación del MAIS en Chile, lo que se relaciona con que aún cuando los fundamentos y estrategias globales planteados privilegian el cambio hacia un modelo de atención en su mayoría participativo, el énfasis en este último tiempo ha sido sobre todo curativo al asegurar el cumplimiento de las prestaciones contenidas en el Régimen de Garantías Explicitas. Con ello, las actividades terapéuticas se tornan centradas en la enfermedad y deja el componente preventivo, promocional y de centralidad en los usuarios en un plano de incertidumbre y a voluntad de los equipos de salud, los que tienden a privilegiar el cumplimiento de las metas ministeriales para asegurar financiamiento de sus centros de salud. Así, la normativa vigente no ha permitido reducir la variabilidad de la instalación del MAIS a nivel nacional, lo que dificulta la comparación de prácticas y evaluaciones obtenidas en distintos centros de atención primaria. Por esta razón, cualquier comparación o generalización debe considerar las características particulares de los participantes de este estudio. A nivel metodológico, este estudio solo utilizó grupos focales para la exploración de participación en la toma de decisiones, lo que podría limitar la comprensión del fenómeno. Si se considera que la participación es, por definición, un proceso interactivo, parece necesario incorporar otras herramientas de recolección de la información como la entrevista individual, con agentes clave (como usuarios, profesionales o tomadores de decisiones políticos) y la observación de consulta clínicas.

Futuras investigaciones podrían utilizar mediciones del nivel de participación de los usuarios en las decisiones clínicas y examinar, además, la perspectiva de los profesionales en cuanto a la promoción de la participación del usuario en la consulta clínica. Así, sería posible examinar el nivel de convergencia y divergencia de los diversos actores del proceso (27) en cuanto al rol que le compete a los usuarios en la toma de decisiones en salud, las oportunidades para tomar dicho rol y el nivel de preparación de tanto del sistema de salud, usuarios y profesionales para promoverlo.

CONCLUSIONES

La participación de los usuarios chilenos de APS en las decisiones clínicas es aún escasa. De acuerdo a la experiencia de los participantes de este estudio, los profesionales siguen manteniendo el poder, pero un trato personalizado y empático les permite confiar el en juicio y decisión del profesional. Promover el involucramiento de los usuarios es esencial para aumentar la satisfacción y promover un cuidado centrado en la persona. Desde la mirada de Alma-Ata, es importante potenciar las capacidades de las personas para asumir la responsabilidad que le compete en el cuidado de su salud. La APS es el punto de entrada de los usuarios al sistema sanitario, por lo que puede modelar la manera en que ellos se relacionarán con los profesionales y el rol que adoptarán en esa interacción. Por este motivo, establecer estrategias para la promoción de la participación en este nivel de atención es fundamental para generar un cambio en el modelo de salud hacia uno más democrático e inclusivo.

Funding Statement

Fuente de apoyo financiero de la Comisión Nacional de Investigación Científica y tecnológica (CONICYT), Fondo Nacional de Investigación en Salud (FONIS), Proyecto FONIS SA14ID0025. FONIS no influyó en el diseño del estudio, en la recolección, análisis o interpretación de los datos ni en la preparación, revisión o aprobación del manuscrito.

Footnotes

Forma de citar Bravo P, Dois A, Contreras A, Soto G, Mora I. Participación de los usuarios en las decisiones clínicas en la atención primaria de salud en Chile. Rev Panam de Salud Publica. 2018;42:e133. https://doi.org/10.26633/RPSP.2018.133

Financiamiento. Fuente de apoyo financiero de la Comisión Nacional de Investigación Científica y tecnológica (CONICYT), Fondo Nacional de Investigación en Salud (FONIS), Proyecto FONIS SA14ID0025. FONIS no influyó en el diseño del estudio, en la recolección, análisis o interpretación de los datos ni en la preparación, revisión o aprobación del manuscrito.

Declaración. Las opiniones expresadas en este manuscrito son responsabilidad del autor y no reflejan necesariamente los criterios ni la política de la RPSP/PAJPH y/o de la OPS.

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