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. 2008 Nov 18;37(7):421–422. [Article in Spanish] doi: 10.1157/13087387

Análisis de la dispensación de antibióticos en pacientes ambulatorios según el proceso infeccioso

AI Barnes 1, MG Paraje 1
PMCID: PMC7679931  PMID: 16733028

Abstract

Objetivos

Conocer los motivos y las características de la dispensación de antibióticos (ATB) en farmacias comunitarias donde los alumnos de farmacia de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Nacional de Córdoba, realizaron sus practices profesionales, formándolos para realizar promoción del uso racional de éstos y para introducirlos en los fundamentos de atención farmacéutica en la antibioterapia.

Diseño

Se realizó un estudio transversal mediante planillas estructuradas, donde los alumnos, supervisados por el farmacéutico instructor de prácticas, recolectaron los datos. Los métodos estadísticos utilizados fueron descriptivos; porcentajes absolutos y relativos (margen de confianza del 95,5%, con un error estadístico < 3%).

Emplazamiento

En total, 48 oficinas de farmacia comunitarias de la Ciudad de Córdoba.

Participantes

Pacientes ambulatorios.

Mediciones principales

Datos del consumo de antibióticos (edad y sexo, diagnóstico, antibiótico prescrito, dosificación, pauta posológica, duración del tratamiento y terapia asociada).

Resultados

Se obtuvo información de 649 pacientes. De estas prescripciones médicas, se observó que el 73% de las solicitudes describía el diagnóstico presuntivo y el 27% restante lo omitía, con un 93% de procesos infecciosos, distribuidos en infecciones respiratorias (75,33%), urinarias (7,69%), dentarias (7,01%), dérmicas (3,16%) y otras (6,81%).

Se seleccionaron las 3 infecciones más frecuentes para su evaluación y se relacionó la medicación antimicrobiana expedida en estas enfermedades. Se observó que la amoxicilina y asociada con el ácido clavulánico fue el antibiótico más solicitado (51,02%). Le siguieron la azitromicina y las cefalosporinas (el 14,57 y el 6,78%), respectivamente (fig. 1).

En las infecciones respiratorias se observó la utilización de 15 antibióticos diferentes, la mayoría incluidos en 3 grupos de antimicrobianos: betalactámicos, macrólidos y quinolonas. Se realizó otro análisis respecto a las infecciones urinarias, que mostró la utilización de 9 antibióticos diferentes. Se observó una baja prescripción de betalactámicos y un aumento destacado en la dispensación de quinolonas. Para el tratamiento de las infecciones dentarias se utilizaron 6 antibióticos diferentes incluidos en 2 grupos de antimicrobianos, con un destacado uso de amoxicilina. Se analizó la dispensación de antibióticos por grupo antimicrobiano, según el tipo de infección, y se observó que los betalactámicos fueron indicados fundamentalmente en las infecciones dentarias (55%) y respiratorias (43%) y tuvieron menos impacto en las urinarias (2%). Se observó que la amoxicilina fue el antibiótico prescripto con mayor frecuencia en este grupo. Para el grupo de macrólidos se observó un 75% de indica ciones para infecciones respiratorias, con el mismo porcentaje de indicaciones de azitromicina y claritromicina. Se evaluó el uso como única indicación de los macrólidos, la claritromicina para las infecciones dentarias, que no fueron indicados en las infecciones urinarias. El 95% de las prescripciones de quinolonas fue destinado al tratamiento de las infecciones urinarias. Ciporfloxacina fue la única quinolona indicada (5%) cuando la localización infecciosa fue de origen respiratorio.

Discusión y conclusiones

Al analizar los datos globales del presente estudio se observó una marcada dispensación de amoxicilina con respecto a los otros antibióticos. El motivo de consulta más frecuente en las prescripciones recibidas en las oficinas de farmacias fueron las infecciones respiratorias. En el caso de las neumonías de la comunidad, se utilizó amoxicilina como betalactámico y azitromicina, que permite dar cobertura antibiótica a los 3 microorganismos (Streprococcus pneumoniae, Chlamydia sp. y Mycoplasma sp.) que con mayor frecuencia desarrollan este tipo de infección en nuestra comunidad. Se observó el uso de norfloxacino como el antibiótico más indicado en las infecciones urinarias, seguido del ciporfloxacina, antibiótico reservado para infecciones urinarias altas con recidiva. También se indicó trimetoprima-sulfametoxazol. En las infecciones de la cavidad bucal se dispensaron betalactámicos debido a la presencia de flora microbiana mixta, aerobia y anaerobia. Los grupos de antibióticos más utilizados fueron los betalactámicos, las quinolonas y los macrólidos.

El porcentaje de formularios recetados en las oficinas de farmacia sin especificación diagnóstica indica un déficit de información que impide evaluar el uso racional de antibióticos y permite destacar la importancia del farmacéutico en la atención farmacéutica en la antibioterapia.

Estos estudios permiten analizar la enfermedad infecciosa en la comunidad, donde el farmacéutico aporta datos epidemiológicos que contribuyen al conocimiento, la prevención y el control de las enfermedades infecciosas y al uso racional de los antibióticos1. Los antibióticos pueden considerase como una de las herramientas terapéuticas más eficientes cuando se utilizan con criterios de racionalidad2.

Palabras clave: Antibióticos, Farmacia comunitaria, Infecciones bacterianas

Bibliografía

  • 1.Saturno P.J. Monitorización de l uso de medicamentos para mejorar la calidad de la prescripción. Problemas, métodos e indicadores. Aten Primaria. 1996;18:331–338. [PubMed] [Google Scholar]
  • 2.Bantar C. Ediciones Britania; Buenos Aires: 2002. El milagro de los ATB. Descubrimiento, uso y abuso. Boletín 2002. [Google Scholar]

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